miércoles, 15 de octubre de 2014

A qué edad se empieza uno a enamorar

Cuando yo andaba alrededor de los seis años, en la misma época en que Otto hacía su papelón, teníamos unos vecinos con los cuales hicimos buenas migas, ellos eran tres hermanos y nosotros también tres y nuestras edades coincidían, así que nos hicimos compañeros de juegos.
Recuerdo una vez que pasada la Navidad, estando en la casa de ellos, nos mostraban los regalos que habían recibido, todos muy bonitos, entonces Carlitos, que era el más pequeño y de mi edad, pide que apaguen la luz porque su nave espacial despedía luces de colores y se veía mejor a oscuras. Mi sorpresa fue que cuando la nave estaba dando vueltas, él me dio un beso en la mejilla, entonces yo no ponía mucho caso a esas cosas y no le dije nada, pero recuerdo que cada vez que nos veíamos, él empezaba a cantar una canción de Armando Manzanero, "adoro, la calle en que nos vimos, la noche cuando nos conocimos, adoro, la seda de tus manos, los besos que nos damos, los adoro vida mía", jajajaja, era muy divertido pero yo entonces no pensaba en amores.


Mi anécdota más vergonzosa vino muchos años después, seis para ser exactos, entonces con 12 años yo ya me fijaba en los chicos, mi mejor amiga y yo, solíamos ir al cine a la matiné de las 3 porque todavía salíamos a la luz del día, era la hora en que todos los chicos nos íbamos a ver los estrenos del momento.  En la ciudad sólo había dos salas de cine en ese entonces, una para películas en español, y otra en inglés, que era a donde íbamos todos.
En ese entonces había un chico pelirrojo y pecoso que coincidentemente también se llamaba Carlos, y me gustaba mucho, y a mi amiga le gustaba un vecino de él, al que le decían Pancho, pues cada vez en la matiné los veíamos a los lejos y suspirábamos por ellos.
Una vez se nos ocurrió enviarles una carta, diciéndoles que nos gustaría que se sentaran con nosotras en el cine, les escribimos el número de la fila en la que estaríamos sentadas y el color de la ropa que llevaríamos, previamente habíamos pasado enfrente de sus casas para tomar nota de la dirección, así que muy seguras, tomamos un sello de los de la colección de su mamá (que no recuerdo de qué país era) y lo llevamos al buzón ubicado en una esquina y nos sentamos ese domingo en el cine con la esperanza de verlos llegar.
Nuestro desencanto no tardó en darse, ambos llegaron pero se sentaron con sus amigos, ni nos voltearon a ver, ambas quedamos muy desconcertadas.
En los siguientes días, nuestras madres, que eran muy amigas, estaban platicando cuando nos vieron llegar, nos dijeron que querían hablarnos y allá te vamos, el cartero había regresado la carta porque el sello no correspondía, y como fuimos tan listas de ponerle remitente, ahí tenían la carta en sus manos, yo quería que la tierra me tragara, pero no me tragó, nos pidieron que fuéramos más juiciosas, que las niñas no hacían esas cosas y que nos deberíamos valorar más, etc., etc., etc., bueno, pasamos el mal rato y ya, qué podíamos hacer.
El problema fue que ellas comentaron con las madres de Carlos y Pancho, seguramente las cuatro se rieron mucho de nuestro atrevimiento, cuando nosotras lo supimos, dejamos de ir al cine de las películas en inglés y nos íbamos al otro, con tal de no ver a los chicos.  Hasta la fecha mi mamá todavía me molesta y se ríe, y yo me enojo,


18 comentarios:

  1. jajajajaja hay que pena miriam, pero no puedo evitar la risa, ustedes muy confiadas en los chicos y ellos ni se habían enterado de la cara, jajajajajaja, sinceramente pensé que el asunto del sello sería peor, que habían tomado una pieza única, de gran valor y que la mafia quería secuestrarlas para robarles el sello, na mentira, estoy tomándote el pelo, linda historia

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    1. Jajajaja, no te preocupes Vilma, me enojo sólo cuando mi mamá se ríe, mi amiga y yo nos morimos de risa cada vez que lo recordamos, así que puedes reírte todo lo que quieras.
      El sello regresó con la carta, así que la mamá de mi amiga lo recuperó :D
      Creo que hubiera sido bueno que alguien nos secuestrara, así no pasamos esa vergüenza.

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  2. Ah! Miriam, ya sabía que nos regalarías alguna de esas historias comprometedoras de las que hablabas! Me han encantado, las dos. Tienen ese aire de otros tiempos, parecen salidas de una peli!
    Divertidas! Me imagino el mal rato que pasaron tú y tu amiga. Y menos mal que regresó el sello! Si era de colección, la madre de tu amiga debía estar muy molesta con el atrevimiento de ustedes!

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    1. Yo también Pelusa, en cuanto supuse que ésta sería la palabra de esta semana, mis antenitas se pusieron a bajar libros, jajaja recordando estas aventuras de mi infancia/pubertad

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    2. Si, el sello debe haber sido importante para la mamá de mi amiga, a nosotras nos parecían todos iguales :)

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  3. jejejeje ¿y porqué no les mandaron la carta con alguna otra niña? jejeje pobrecitas, que pena. A mí mamá también me cachó una cartita amorosa que obviamente, tampoco llegó a su destino :) Yo tenía 9 años :)

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    1. Ah no Hilda, nadie tenía que enterarse!!! jajajaja

      Me consuela saber que no fuimos las únicas :D

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  4. Miriam, lo que sucede es que te adelantaste al tiempo, ja ja, ahora eso es de lo más común en la juventud actual.

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    1. Uhhhhh si Angélica, eran otros tiempos, cuando las señoritas aún éramos recatadas, jajajaja.

      Lo que ha traído la revolución femenina, ¿o cómo es que se llama? :D

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    2. ¡¡¡Liberación Femenina!!! jajajajaja

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  5. Je jeje que bueno y que bonito. Quien sabe, a lo.mejir fue que nunca llegase la.carta. Muy buena historia y siento que tuvieses que cambiar de sala.... un abrazo

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    1. Definitivamente fue mejor que esa carta nunca llegara, lo que nunca supimos es si esos dos chicos se enteraron del intento fallido, nuestras madres eran amigas, así que la historia pudo filtrarse :)
      Si, nosotras también lamentamos habernos ido al cine en español, las películas no eran tan buenas como las otras.
      Otro abrazo

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  6. Me pareció gracioso que en ese caso fueran ustedes las conquistadoras... y me llamó la atención que el niño de 6 años se la pasara cantando una canción tan significativa, tal vez porque hoy eso es muy extraño en alguien de esa edad. :)
    ¿Quedó aprendida la lección desde entonces? Jajaja.

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    1. Uy si Alex, fuimos unas atrevidas, muy adelantadas para la época, jajaja.

      Ese niño era muy precoz, yo no estaba preparada para tanto romanticismo :)

      Ahh si, por supuesto ¡lección aprendida! jajaja

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  7. Miriam me parece genial la historia, eras y supongo eres una mujer muy adelantada y que sabe lo quiere, es una pena que la carta no llegará y que la reprimenda que les dieron.
    Saludos

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    1. Christian, más que adelantada creo que soy atrevida, jajaja, siempre he pensado que una vez se vive y si no se aprovecha cada minuto de la vida, se desperdicia :D así que cuando se da la oportunidad de actuar, hay que hacerlo, jajaja.

      Fíjate que fue mejor que la carta no llegara a su destino, hay cosas que deben quedar en el intento.
      La reprimenda no estuvo tan fuerte, lo más duro fue recibir las burlas :(

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  8. Huy que pena que la carta no llegara a sus destinatarios Miriam, y encima la reprimenda de tu mamá. Pero ya me imagino cómo se habrán reído después entre las 4 al imaginarse a sus muchachitos juntos en el cine, es que las mamás somos malas! jajajaja

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    1. No Loly, con el paso de los años le dimos gracias a Dios que no llegara la carta a su destino, jajaja, lo más bochornoso era saber que de igual manera ellos y sus familias se enteraron. En eso sí estoy de acuerdo, nuestras madres fueron malas porque no guardaron el secreto :(

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