Hace algunos años, en circunstancias que ya son más leyenda que anécdota (¿o será al revés?), me fracturé el pie derecho y estuve algún tiempo convaleciente.
Como por entonces estaba reciente el éxito de la película protagonizada por Daniel Day-Lewis, se me ocurrió, para matar el tedio y motivar mi sentido del humor, escribir sobre las andanzas (o los intentos) de "mi pie izquierdo" por adaptarse y salir adelante. Allí aparecieron desde el panorama que veía por mi ventana hasta los Juegos Olímpicos y el homenaje a un autor mil veces releído.
Las historias poco a poco se convirtieron en reflejo de mi actividad (mental), en una versión irónica de quejas que de otro modo a nadie le interesaría escuchar, o simplemente en una manera de aclarar ideas y ahuyentar los desvaríos.
Cansado de la insistencia (a veces amistosa y otras no tanto) de quienes preguntaban por mi recuperación, decidí enviar por correo electrónico algunos de esos textos. Funcionó a medias, porque los corresponsales dejaron de preguntar por mi salud y empezaron a preguntar por los relatos.
La recuperación, me alegra decirlo, fue exitosa, pero la insistencia de los corresponsales nunca me dio el alta. Tiempo después, varios apuntes encontraron nueva vida y un público más amplio. Aunque tal vez no sea tan cierto, lo agradezco a la motivación de las letras, que estaba presente desde mucho tiempo atrás, pero que encontró su camino en el ejercicio (y el ejemplo) de un pie izquierdo que siempre había estado allí, cómodo en el anonimato, hasta que le llegó la hora de dejar su propia huella.
Eso es una buena salida con el pie izquierdo, ves? Luego dicen que todo lo izquierdo es negativo :) A veces hace falta un tiempo de quietud e incomodidad para remover sedimentos.
ResponderEliminarMuy simpática la idea de que los corresponsales nunca te dieron de alta. Los entiendo. Me cuento entre las lectoras de esa ágora mayor que encontraste luego para tus textos y, sí, sigo pidiendo más.
Bien por tu pie izquierdo!!!! Que no todo lo izquierdo es malo!!! Mira...los caballos se montan por la izquierda (y las motocicletas tambien) y a los perros cuando se les ensenia a caminar al lado del duenio se les lleva por la izquierda. Ademas...tu pie izquierdo te abrio el mundo d elas letras y te doto de seguidores. Un secreto: soy zurda...jajajajajaja
ResponderEliminarjejeje quedó olvidado tu pie izquierdo :) bueno, dejó algo bueno.
ResponderEliminarPor cierto, esa película siempre me recuerda a mi mamá, porque ella creía que el actor Daniel Day Lewis en verdad estaba enfermo. Creo que eso es prueba de que mereció el Oscar a mejor actor
Que genialidad!!!! Felicitaciones Ivanius, pero..ahora me intrigan muchisimo esos textos :D
ResponderEliminarPues qué bien que te fracturaste! digo, si no, no salían a la luz esos relatos jejejeje.
ResponderEliminarBromas aparte, no por casualidad es que los lectores no te dieron el alta, es que cuando te encuentras con algo de calidad no lo pierdes de vista fácilmente.